El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) presentó su pronóstico climático trimestral para octubre, noviembre y diciembre de 2025. El informe indica que el último tramo del año estará caracterizado por temperaturas superiores a lo normal en gran parte del país, mientras que las lluvias se ubicarán dentro de los valores normales en la mayoría de las regiones.
Precipitaciones: dentro de lo esperado, con variaciones regionales
Según el SMN, se prevén precipitaciones normales o inferiores a lo normal en el Litoral y noroeste de la Patagonia, mientras que en el NOA existe una mayor probabilidad de lluvias superiores a lo normal.
En cambio, para el resto del país —incluyendo la región central, Cuyo, La Pampa y la mayor parte de la Patagonia— las lluvias se mantendrán en rangos normales.
Es importante remarcar que el pronóstico refleja el promedio del trimestre y no descarta que se registren períodos cortos con excesos o déficits de agua. Por ello, se recomienda complementar esta información con los pronósticos diarios y semanales disponibles en el sistema de alerta temprana del SMN.

Temperaturas: un fin de año más caluroso
l escenario térmico muestra una clara tendencia al calor:
- Normal o superior a lo normal hacia el norte y noreste del país, y en provincias patagónicas.
- Superior a lo normal en la franja central, con mayor probabilidad en Córdoba, este de San Luis y oeste de Santa Fe.
- Normal en el NOA.
Esto significa que gran parte del territorio nacional podría enfrentar condiciones más cálidas de lo habitual, lo que aumenta las chances de olas de calor y extremos térmicos.

Qué tener en cuenta
El SMN recuerda que este tipo de pronósticos son de carácter estacional y marcan una tendencia promedio. No predicen eventos puntuales, por lo que fenómenos de corta duración —como tormentas intensas, frentes fríos o calor extremo— pueden presentarse igualmente. El trimestre se presenta con lluvias normales en la mayor parte del país, aunque con focos de déficit en el Litoral y Patagonia y excesos en el NOA. A esto se suma un escenario de temperaturas superiores a lo normal en la zona central, lo que puede aumentar el riesgo de estrés calórico en la hacienda. Frente a este panorama, es clave planificar reservas forrajeras y suplementación donde las lluvias sean escasas, reforzar el suministro de agua y sombra en los rodeos, y ajustar planes sanitarios ante la posible mayor presión de parásitos. Una buena anticipación en el manejo puede marcar la diferencia en la productividad de la próxima campaña.
El último trimestre de 2025 en Argentina estará signado por altas temperaturas y lluvias dentro de lo normal en la mayoría de las regiones, con algunas excepciones. Para quienes dependen del clima en su actividad diaria —productores, planificadores y ciudadanía en general— será clave mantenerse atentos a los pronósticos de corto plazo y alertas oficiales.



